Lograda la Pacificación de La Araucanía, para el gobierno “la primera prioridad era la ocupación efectiva del espacio regional mediante la colonización y la incorporación económica de esas tierras… En 1898 se dictó otra ley que favorecía a todo chileno que cumpliendo ciertos requisitos deseara incorporarse como colono… Esta medida fortaleció la instalación de familias chilenas en Cherquenco… Prados de Mendoza, Tumuntuco y Diego de Almagro” (I.G.M., 1985).
A fines del siglo XIX y comienzos del XX la región empieza a recibir colonos europeos, los que se instalan preferentemente en las ricas tierras de la Depresión Intermedia. Empiezan, así, ha aparecer apellidos extranjeros en la comuna, sea llegados como colonos o descendientes de ellos. San Patricio, por ejemplo, fue posible construirlo gracias a las tierras donadas por la familia Rawson Makaya; en Cherquenco se radica don Carlos Keller; en Vilcún Ernesto Behnke Vergara y don Pablo Lüer Metzner. Este último era hijo de colonos alemanes que llegaron a Valdivia durante el proceso de colonización dirigido por Vicente Pérez Rosales.
“Alrededor de 1902 surge en el sector que hoy es el Cementerio Municipal un poblado al que se denominó “Vircún”. En esa fecha existían en el territorio que hoy forma esta comuna sólo dos pequeños pueblos cuya principal actividad económica giraba en torno a la madera: San Patricio y Cherquenco. Su ubicación varió en 1911, al inaugurarse el ramalferroviario que extendió su servicio desde Cajón hacia el oriente. El primitivo poblado empezó a aproximarse a la línea férrea y pasa a denominarse “Vilcún”.” (Castillo, C. y Gatica, J. 1998).
En los comienzos la comuna fue configurándose como un territorio alargado e irregular como una lagartija. De ahí su nombre: “Filcún”, vocablo mapuche que significa lagartija. En 1915 la Municipalidad de Temuco había creado la delegación de Vilcún, bajo su dependencia, la que desde todos sus rincones tiene como telón de fondo la imponente figura del volcán Llaima, de 3.125 metros de altitud que se ha convertido en lugar obligado de visita para los turistas que llegan a la comuna.
La comuna es el resultado de la aspiración de sus habitantes de independizarse de Temuco y lograr así un despegue económico que ellos veían como más viable de esa forma.
Esto se logra cuando el gobierno de don Arturo Alessandri Palma dicta el Decreto Supremo Nº 3.671, de 18 de octubre de 1926 que crea la comuna de Vilcún. Las gestiones para este trámite las realizó una comisión de honorables vecinos que viajan a Santiago con ese fin. Esta la conformaron los señores Pablo Lüer, Tobías Gómez, el Senador Artemio Gutiérrez y Ernesto Behnke, a la fecha Subdelegado de la comuna de Vilcún.